Por: Verity McGivern
Las personas mayores refugiadas se enfrentan a desafíos significativos cuando son desplazadas. Pueden ser víctimas de discriminación, su seguridad está en riesgo y a menudo tienen que superar las barreras para acceder al apoyo y la asistencia que necesitan. Estos riesgos pueden intensificarse aún más para las mujeres y para personas con discapacidad.
Las personas mayores refugiadas están encontrando formas de hacer oír su voz a nivel local, pero es importante que también formen parte del debate mundial sobre la política de refugiados.
Cuando los líderes mundiales, agencias internacionales, ONG y representantes de refugiados se reunieron en Ginebra para el Foro Mundial sobre los Refugiados en diciembre, yo fui a representar a HelpAge y asegurarme de que las personas mayores no fueran pasadas por alto en las discusiones.
Estábamos esperando escuchar qué compromisos se harían para cumplir con las obligaciones que los gobiernos habían firmado en el Pacto Mundial sobre los Refugiados, acordado un año antes.
Se hicieron más de 700 compromisos en la conferencia, pero nuestro análisis inicial muestra que ninguno se centró en las necesidades de las personas mayores refugiadas. El Foro fue una buena oportunidad para crear conciencia sobre los problemas que enfrentan las personas mayores refugiadas, pero fue decepcionante que los gobiernos y otros actores no hayan asumido los compromisos necesarios para proteger sus derechos.
La realidad que enfrentan las personas mayores refugiadas
Cuando las personas huyen, las familias a menudo se separan y las estructuras comunitarias y de apoyo se ven afectadas, lo que dificulta que las personas mayores reciban el apoyo que necesitan.
Además, sus roles a menudo disminuyen como resultado de la pérdida de recursos y activos de la comunidad causados por su desplazamiento.
Mientras tanto, las comunidades de acogida, los gobiernos y las agencias humanitarias a menudo excluyen a las personas mayores y no reconocen sus roles y capacidades.
John Vyabagabo, un refugiado de Burundi, que huyó de su casa tres veces y se encuentra actualmente en Tanzania, contó su historia en este video:
Visité campos de refugiados en Gambella, Etiopía, un mes antes del Foro, conocí a personas mayores refugiadas y escuché sobre los problemas que enfrentan.
La respuesta humanitaria en Gambella tiene una severa carencia de fondos y, a medida que se toman decisiones difíciles sobre cómo usar los recursos limitados, las personas mayores refugiadas son a menudo quienes más pierden. Muchos sufren de desnutrición, también son vulnerables al robo y la violencia y, a menudo, no reciben el apoyo que necesitan para reparar albergues deteriorados e inadecuados.
Sin embargo, lo que fue inspirador fue ver cómo las personas mayores están tomando medidas para garantizar que sus voces sean escuchadas.
Con el apoyo de HelpAge, las asociaciones de personas mayores (OPA, por sus siglas en inglés) están activas en los campos de refugiados, identificando los problemas que enfrentan y asegurándose de que estos sean dados a conocer y llamen la atención de las ONG y las autoridades de los campamentos. También juegan un papel importante en la resolución de conflictos en el campamento y con la comunidad anfitriona.
Aquí está lo que podemos hacer
El hecho de que el Foro no muestre ningún compromiso con los derechos de los refugiados no significa que debamos desistir. Todavía hay tiempo para pedir a los gobiernos que aborden los desafíos que enfrentan las personas mayores en los campos de refugiados.
Las experiencias de los refugiados mayores inspiran el apoyo de los gobiernos. En el Foro vimos a Johanna Sumuvuori, Viceministra de Asuntos Exteriores en Finlandia, preguntar ¿qué pasa con las personas mayores?, ¿los servicios son lo suficientemente inclusivos y accesibles?
Continuaremos instando a los gobiernos y otros actores a hacer compromisos y reconocer las necesidades específicas de las personas mayores refugiadas. No podemos descansar hasta que los gobiernos expresen su apoyo, con compromisos reales para proteger los derechos de las personas mayores.
HelpAge ha producido documentos guía sobre contribuciones que van dirigidos a gobiernos, agencias internacionales y ONG. Estos incluyen ejemplos de compromisos que se pueden utilizar para asegurar los deberes de los gobiernos y otros actores nacionales.
Necesitamos asegurarnos de que los gobiernos y los donantes que tienen una actitud positiva hacia nuestra causa, influyan en los actores mundiales y los hagan rendir cuentas.
Podemos ayudarlo a relacionarse con su gobierno, póngase en contacto con verity.mcgivern@helpage.org
Juntos, podemos garantizar la protección de los derechos de las personas mayores refugiadas.