Del pasado 23 al 26 de julio, se celebró en Nueva York la novena sesión del Grupo de Trabajo de Composición Abierta sobre envejecimiento de la ONU. Este encuentro, en el que se revisan instrumentos jurídicos de derechos humanos a la luz de la protección de las personas mayores, reunió a representantes de gobiernos, instituciones de Derechos Humanos y de la sociedad civil para discutir este año, por un lado, los derechos a la autonomía y a la independencia y, por otro, a los cuidados paliativos y de largo plazo.
HelpAge International, por supuesto, estuvo presente en este, durante el cual brindó sus declaraciones como una de las organizaciones globales líderes en el trabajo por y con las personas mayores y realizó otras reuniones y actividades clave para la incidencia en cuanto la articulación, avance y visibilización de su trabajo.
Asimismo, con la invitación y acompañamiento de HelpAge, Vanda Ou y Vérène Nyirabalinda, mujeres mayores de Camboya y Ruanda, respectivamente, asistieron a este espacio de trabajo por sus derechos, en el que tuvieron la oportunidad de alzar sus voces en representación de sus comunidades, contando sus experiencias sobre la independencia y la autonomía.
La libertad de decidir por nosotros mismos
Durante 2017, HelpAge condujo y entregó como insumo para esta novena sesión del Grupo de Trabajo de Composición Abierta (GTCA) sobre el envejecimiento, un estudio sobre los derechos a la autonomía y la independencia y a los cuidados paliativos y de largo plazo de las personas mayores: “La libertad de decidir por nosotros mismos“. En éste, los mayores hablan sobre lo que significa para ellos la autonomía e independencia y comentaron sobre la falta de cuidados paliativos y de largo plazo, diciendo que pocas veces existían este tipo de servicios en sus comunidades.
En el mismo informe, un dato preocupante fue que las personas mayores dijeron que querían ser independientes y autónomos pero que sus gobiernos, sus líderes locales, los proveedores de servicios e incluso la familia muchas veces evitaban que ellos pudieran tomar sus propias decisiones. Al respecto, Bridget Sleap, asesora senior de políticas y derechos de HelpAge International, dijo “Los mecanismos existentes de derechos humanos no están adecuadamente hechos para proteger a los mayores, por ende los Estados están fallando al intentar otorgar las necesidades de los mayores”.
Así mismo, en el marco de esta novena sesión del GTCA, HelpAge realizó un evento paralelo en el que las protagonistas fueron las personas mayores. En este se habló principalmente sobre los derechos a la autonomía e independencia y se hizo el lanzamiento de un video en el que hombres y mujeres mayores de varias partes del mundo, incluido Costa Rica en Latinoamérica, expresaron qué es para ellos el ejercicio de este derecho.
En el segundo día, el GTCA discutió los derechos a la autonomía e independencia y tanto HelpAge, como las mujeres mayores que estaban allí con la organización hicieron sus intervenciones. Por su parte, la organización internacional declaró que “es evidente que, para que podamos disfrutar de nuestro derecho a la autonomía y la independencia en la vejez, se requiere un cambio de paradigma de las actitudes discriminatorias que devalúan, descartan o ignoran las opiniones y elecciones de las personas mayores; debemos alejarnos de la idea de que los demás deben tomar las decisiones ‘por nuestro bien’ cuando seamos mayores. Este cambio de paradigma debe consagrarse en un marco jurídico internacional que garantice el derecho de las personas mayores a la autonomía y la independencia en todos los aspectos de la vida”.
También, Verene, mujer mayor de Ruanda, expresó: “Es responsabilidad del gobierno asegurarse de que las decisiones de las personas mayores sean respetadas en la ley y en la práctica y que las personas mayores tengan la información y el apoyo que puedan necesitar para tomar esas decisiones”.
Atención y cuidados para vivir con dignidad
En el tercer día de la novena sesión del Grupo de Trabajo de Composición Abierta sobre envejecimiento, el tema fue el de los cuidados paliativos y de largo plazo. En este campo, las siguientes fueron las declaraciones de HelpAge:
En el reciente estudio de HelpAge “La Libertad de decidir por nosotros mismos”, las personas mayores dijeron que querían acceso a servicios de atención y apoyo que les permitieran vivir sus vidas de acuerdo con lo que es importante para ellos. Sin embargo, muchos no tienen acceso a los servicios que pueden necesitar ni a ningún control sobre esos cuidados cuando lo hacen. En Kenia, una persona mayor dijo: “No tenemos voz ya que es un favor”.
Debemos avanzar hacia servicios de atención y apoyo, cuyo propósito no solo es ayudarnos con las actividades diarias sino también mantener nuestra autonomía e independencia y apoyar nuestra participación en la sociedad.
Las normas internacionales de derechos humanos son necesarias para lograr este cambio conceptual y práctico. Los estándares deben incluir el derecho de las personas mayores a tomar decisiones libres e informadas sobre todos los aspectos de su cuidado y atención, de principio a fin; el derecho a optar por no recibir el servicio en cualquier momento, y el derecho a controlar la planificación, la entrega y el monitoreo de estos.
En nuestra consulta, muy pocas personas mayores conocían o tenían acceso a los servicios de cuidados paliativos para ayudarlos a vivir y morir sin dolor ni sufrimientos innecesarios.
Al igual que con el derecho a cuidados y atención, el derecho a cuidados paliativos debe garantizar el derecho de las personas mayores a la autonomía, incluso a través del acceso a directivas anticipadas, testamentos en vida y otros documentos legalmente vinculantes que establecen su voluntad y preferencias en torno a intervenciones médicas y otros cuidados y apoyo al final de la vida, incluido el lugar donde se brindan los cuidados paliativos.
Las personas mayores tienen derecho a la atención y servicios de apoyo para una vida independiente. Estos deberían adaptarse a sus necesidades individuales, promover su bienestar y mantener su autonomía e independencia, sin discriminación de ningún tipo.
Sí, una convención de la ONU es necesaria
Adicionalmente, la Alianza Global para los Derechos de las Personas Mayores GAROP (Global Alliance for the Rights of Older People), en la cual HelpAge es uno de sus 266 miembros, brindó una declaración en la que, a pesar de celebrar el esfuerzo y avance del grupo de trabajo, indica que este aún no ha entregado los resultados esperados.
En ese sentido, señaló que el GTCA sobre envejecimiento ya ha escuchado amplia y convincente evidencia acerca de las fallas significativas de los instrumentos y procedimientos de derechos humanos existentes para la garantía de los derechos humanos de las personas mayores, incluida su aplicación adecuada, y reitera su posición de que es necesaria una convención de la ONU jurídicamente vinculante para abordar de manera efectiva las cuestiones relacionadas con los derechos de la población mayor. Allí indicó que las 10 acciones propuestas por la Organización Mundial de la Salud en la Década del Envejecimiento Saludable 2020, como necesarias para alcanzar los objetivos de la Estrategia y Plan de Acción Mundiales sobre el Envejecimiento y la Salud, ofrecen el momento ideal para comenzar a redactarla.
¿Y qué dicen los Estados?
El apoyo para conseguir una convención de la ONU para los derechos de las personas mayores sigue creciendo, el caso más claro es el de Canadá, país que antes se oponía y ahora se declara abierto a la discusión. Por otro lado, Mauricio se convirtió en el último Estado africano que expresó su apoyo a la convención. Las organizaciones nacionales de la sociedad civil influyeron en estas posiciones, lo que demuestra que sí podemos hacer la diferencia.
Por otro lado, Sudáfrica dijo que está revisando su Ley de Personas Mayores para abordar las brechas que han surgido en su implementación, mientras que Alemania se refirió a la dificultad de poner práctica diariamente la garantía de los derechos a la atención y cuidados que todos tienen en el país. Por su parte, Eslovenia señaló que la falta de estándares en esta área se ve agravada por el edadismo y el abuso.
Es de celebrar que los Países Bajos expresaron que, si queremos garantizar la autonomía e independencia de las personas mayores en los entornos de atención y cuidados, debemos ajustar estos servicios a la rutina preferida de la persona mayor y no al revés.
También, en América Latina, República Dominicana dijo que ninguna constitución en el mundo establece cuándo terminan la autonomía y la independencia y que las personas mayores tienen los mismos derechos que cualquier otra persona. Costa Rica hizo referencia a que el desafío es tener una atención asequible y accesible sin discriminación para todas las personas mayores, independientemente de sus circunstancias socioeconómicas.
El trabajo no cesa
Entre las acciones adicionales de HelpAge en el marco del encuentro, el 26 de julio, junto la organización AGE Platform Europe y con el apoyo de la Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos de la ONU, realizó también un evento paralelo para debatir sobre el contenido de los derechos a la no discriminación e igualdad y a la libertad frente a la violencia, abuso y abandono.
Además, junto a Jemma Stovell de HelpAge, Vérène Nyirabalinda, representante de las personas mayores de Ruanda, se reunió con el representante permanente de su país ante la ONU Valentine Rugwabiza para hablar sobre compromiso de ese Gobierno con los derechos de las personas mayores. Por otro lado, nuestro director ejecutivo Justin Derbyshire se reunió con el Fondo de Población de las Naciones Unidas, con el que se espera una mayor colaboración para el trabajo por las personas mayores.
La brasileña Laura Machado, miembro de la junta directiva de HelpAge International, asistió también al GTCA este año y dejó para los miembros de HelpAge en América un videomensaje sobre la importancia de este espacio, en la búsqueda de un instrumento vinculante para la garantía de los derechos humanos de las personas mayores, en el que resaltó que mientras que los países desarrollados parecen conformarse con los instrumentos ya existentes, que no son vinculantes; los países en vías de desarrollo ejercen más presión, mediante la presentación de evidencias.
Las personas mayores deben liderar la defensa de sus derechos para que una convención de la ONU refleje su experiencia y puntos de vista y conseguir que más representantes gubernamentales con experiencia asistan al GTCA, así como que los Estados miembro asignen suficientes recursos para que este se pueda llevar a cabo de manera efectiva.
Lo siguiente es hacer un seguimiento a los resultados de esta sesión con su gobierno y así tomar medidas para influir en ellos con el fin de apoyar una convención sobre los derechos de las personas mayores y de participar en el décimo Grupo de Trabajo de Composición Abierta sobre el envejecimiento. Pronto se conmemorará el Día Internacional de las Personas Mayores y es una oportunidad para lanzar más iniciativas que demanden este instrumento, acaben con la discriminación por edad y reconozcan el trabajo de incidencia que realizan hombres y muejres mayores por sus derechos.
En 2019, los temas a discutir en el décimo GTCA serán:
1. Protección social y seguridad social (incluidos los pisos de protección social) y
2. Educación, formación, aprendizaje del registro de vida y desarrollo de capacidades.