La pandemia de COVID-19 ha generado un esfuerzo global sin precedentes para desarrollar vacunas seguras y efectivas a escala y velocidad.
Pero a medida que la implementación de los programas de vacunación avanza y se adapta rápidamente en un pequeño número de países de altos ingresos, se deben tomar medidas para garantizar que el derecho a la vacunación se comparta entre todas las poblaciones de todos los países, sin importar sus ingresos.
Debemos asegurarnos de que los derechos de las personas mayores estén adecuadamente protegidos en este esfuerzo global.
HelpAge hace un llamado a la acción colectiva y la cooperación global para garantizar un acceso equitativo y no dejar a nadie atrás.
Dos cuestiones deben abordarse con urgencia para que esto suceda:
- ¿Cómo se logrará la distribución equitativa de vacunas entre los países más ricos y los más pobres?
- ¿Cómo se tomarán las decisiones sobre la priorización de los receptores de vacunas a nivel nacional?
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